Cóctel de sandía refrescante

Hoy os traigo una receta “robada” a mi sobrina María y Sergio: cóctel de sandía refrescante Una forma original, rica y fresca de disfrutar la sandía, y más si somos varios los que nos juntamos con esta rica fruta que es sinónimo de verano. Nos gustó tanto cuando lo preparó y lo disfrutamos al borde de la piscina, que no me he podido resistir a compartirla con vosotros. Pero el mérito, de ellos… al César lo que es del César ¿verdad?

Os pongo una receta “básica” sin alcohol, para disfrutarla grandes y pequeños. ¿Se le podría poner algo de alcohol? Pues perfectamente combina con un ron oscuro, por ejemplo. Durante el día yo la dejaría “sin alcohol” por aquello del calor, sol, piscina, alcohol… Y de noche, parece que pega más ese toque de ron. Ya os lo dejo a vuestra elección, porque tanto una versión como otra, están muy ricas.

¿Cómo se sirve? Pues en principio pusimos muchas pajitas, pero era muy difícil porque por la fruta troceada, se intentaba colar por la pajita. Así que os recomiendo un buen vaso ancho y beberla directamente, con los tropezones de la fruta.

Algo fundamental es que la sandía esté muy fría. Esta llevaba un par de día en la nevera, sin abrir. Se le puede poner hielo para mantener la bebida fría, pero ayuda el que todo esté muy frío desde el inicio, al igual que el refresco.

¿Os apetece prepararla? Pues a lavarse las manos que todo está listo para empezar. Nos metemos en la cocina al grito de ¡ya!

Ingredientes para 6-8 personas aproximadamente:

- 1 sandía sin semilla, al ser posible, que haya estado en nevera al menos el día antes.

- 1 botella de refresco sabor lima-limón.

- 1 limón natural.

- Hierbabuena.

- Hielo, picado o en cubos.

- Opcional: azúcar moreno y ron.

Preparación:

- A la sandía le cortamos uno de los extremos, para hacer un pequeño círculo de base y poderla mantener vertical. En el otro extremo, cortamos otro círculo un poco más grande que el de la base. Deberíamos de ver la pulpa roja de la sandía.

- Vaciar la pulpa de la sandía, dejando sólo la corteza. Lo podemos hacer con unas cucharas soperas o una cuchara de servir helados. Picar la pulpa, quitar las posibles semillas que pueda tener y reservar con el jugo que suelte.

- Lavar el limón y cortarlo en medias rodajas. Reservar.

- Lavar la hierbabuena y quitar los tallos, dejando sólo hojas sueltas. Reservar una rama vistosa para la presentación.

- Para rellenar la sandía ponemos la pulpa picada. Al gusto añadir un poco de azúcar moreno o no (es opcional). Incorporar las hojas de hierbabuena, las medias rodajas de limón y algunos hielos. Si deseamos añadir ron, es el momento a nuestro gusto. Incorporar el refresco de lima-limón y remover todo con un cucharón (el de las sopas viene perfecto). Terminar de completar con refresco. Decorar con pajitas de colores y una buena rama de hierbabuena. Servir enseguida y ¡a disfrutar!

Nuestra sandía lista para servir y disfrutar

Un buen telón de fondo para disfrutar 

y refrescarnos con esta sandía ¿verdad?