Abro
con esta entrada otra sección más en el blog: PRODUCTOS NATURALES.
En ella iré poniendo desde productos de limpieza (como este caso de hoy), así
como otras cosas que estoy poniendo en práctica y como me funcionan, quiero
compartirlas con vosotr@s
Tuve
un problema bastante gordo que tuve a principios del invierno 2019. Yo tengo
lavadero y patio, junto a la cocina y la lavadora está ahí ubicada. Se me hizo
tal atasco en la tubería donde echa desagua, que casi nos veíamos mi marido y
yo levantando todo el lavadero y patio, para descubrir la tubería y tenerla que
cambiar (y volver a tapar todo, con lo que ello conlleva). Una empresa de desatoro profesional, consiguió despejarme la tubería, pero
reconocieron que tuvieron muchísima suerte. ¿Origen del problema? Posiblemente,
el usar jabón en polvo. En mi zona, el agua tiene mucha cal (es agua dura, como
se suele decir) y a pesar de lavar siempre a 30º mínimo (para disolver mejor el
jabón y evitar que se formen “pelotas”, al margen que ablanda las manchas que
pueda tener la ropa), y utilizar productos anti cal en los lavados, esta
empresa apostaba que ahí podía estar el origen del atasco (que estuvimos más de
una semana sin poder utilizar la lavadora ni echar agua en una pequeña pila que
tenemos al lado). Así que desde entonces, me cambié al detergente líquido que
podemos encontrar en cualquier comercio habitual.
Llevo
meses intentando hacer jabón líquido casero. Al margen del ahorro económico,
porque suele llevar ingredientes anti cal, con lo cual, no tendría que echar
ningún producto extra en cada lavado. No quería utilizar el clásico jabón que
se hace con aceite usado y sosa caústica. Para empezar, porque los fritos en
casa, llevamos casi un año que no lo hacemos o lo hacemos en muy contadas
ocasiones. Tampoco me apetecía pidiendo a mis amigos que me guardaran sus
aceites usados, porque a veces es más fácil de echarlo en los contenedores de
reciclajes que hay para ello, que tener ahí botellas a saber cuándo podíamos
vernos y llevármelas. Además no me gusta demasiado la sosa caústica… la veo
demasiado abrasiva, peligrosa al manejarla
(he hecho jabón con amigos y no me gustó la experiencia por los olores
que había), ni tampoco el esperar los 40 días aproximadamente que necesita para
el proceso de saponificación (el proceso químico por el cual, algo que se
utiliza para cocinar y que mancha, se convierte en un producto que limpia y es
desengrasante). Pero no me terminaba de convencer ninguna receta de las
publicadas en tantos sitios como he mirado.
Hace
poco me encontré en Youtube con un vídeo de María Esteve, donde explicaba su
método para hacer jabón líquido para lavadora (ver su vídeo pinchando aquí ). Yo hacía básicamente lo mismo, pero
de forma diferente y quizás ahí, podía estar la causa. Decidí a probarlo,
haciendo alguna modificación: ella utiliza lejía (ya sea para ropa blanca o de
color). Viendo las cantidades que salen de jabón líquido con sus medidas (8
litros me han salido a mí aprox.), no quería tener jabón para ropa blanca y
jabón para ropa de color. Además no me gusta mucho las lejías para ropa de
color (las rosas) porque precisamente, suelen comerse mucho el color de las
prendas. La lejía para ropa blanca es algo utilizo muy puntualmente y prefería
añadirlo como extra, a tenerlo dentro del jabón. Lo que sí suelo utilizar en
todos los lavados, es amoniaco (con detergente o normal). ¿Motivo? Desengrasa,
desinfecta, quita olores, la ropa no sale para nada oliendo a amoniaco (se
añade al principio del lavado) y sirve para todo tipo de prendas. Así que las
cantidades que ella daba de lejía, las cambié por amoniaco. También utilicé
detergente líquido, en vez de en polvo, porque como os he dicho, hace casi 1
año que no utilizo ese jabón. Localicé a María en Facebook en un grupo que
tiene, y me dijo que lo podía cambiar sólo que iba a tener más espuma en los
lavados. Decidí a probar su receta, con estas modificaciones.
El
resultado ha sido estupendo, sinceramente. Como os he comentado, me ha salido 8 litros de un jabón muy cremoso que huele muy bien. Lo he utilizado en
lavados, rellenando botellas de detergente líquidos que tenía vacía, y lo he
dosificado igual que si fuera jabón líquido comercial. No me ha hecho espuma en
el lavado (creo que es porque el suavizante quita la espuma del jabón), pero no
me ha importado porque por no hacer espuma, no significa que lave peor. El
jabón ya va perfumado por el suavizante, pero si queréis más aroma, siempre se
puede añadir más en la cubeta de la lavadora.
Os
cuento los ingredientes y la forma de prepararlo. Súper fácil, súper rápido y
súper eficaz:
Ingredientes
(las medidas son vasos de agua, aprox. 200ml):
- 1
vaso de suavizante
- 1
vaso de jabón en escamas (podéis comprarlo así directamente, o rallar las
típicas pastillas de jabón natural que encontráis en cualquier comercio).
- 1
vaso de bicarbonato sódico: el que se utiliza como levadura y cuando tenemos
digestiones pesadas. Quita olores y manchas y es muy efectivo como anti cal y
desatorando tuberías.
- 1
vaso de vinagre: yo he utilizado vinagre de limpieza (transparente) por venir
concentrado, pero sirve cualquier otro que tengáis en la cocina. El de limpieza
es fácil de encontrar en los comercios.
- 1
vaso de amoniaco perfumado.
- 2
vasos de jabón convencional (líquido o polvo).
- 4
litros de agua.
Preparación:
- Yo
lo he hecho todo en un cubo de unos 10 litros aproximadamente, porque el jabón
va a “crecer” durante la elaboración y me resultaba más cómodo. Sirve cualquier cubo, barreño, olla o
recipiente que tenga esa capacidad.
- He
puesto todos los ingredientes, menos el vinagre. He añadido 2 litros de agua
muy caliente, y con la batidora eléctrica, he disuelto el jabón en escamas y
mezclado todo. Cuando estaba bien unido, he añadido el vinagre muy poco a poco,
porque con el bicarbonato, hace espuma y sube mucho. La ventaja de hacerlo en
un cubo como el que pongo en las fotos, es que no rebosa (cosa que puede pasar
con las ollas). Una vez que se incorpora todo el vinagre y el preparado deja de
hacer espuma, vuelvo a meter la batidora para ligarlo todo. Tapo el cubo y lo
dejo reposando toda la noche.
- Al
día siguiente, caliento otros 2 litros de agua y se lo añado. Vais a ver que el
cubo tiene como una capa más espesa en la superficie. Se rompe fácil al tocarla
y debajo está el jabón más líquido. Con el agua caliente añadida, vuelvo a
meter la batidora para unir todo. Ir hasta el fondo del cubo, porque suele
tener partes espesas en la base. Tapar
el cubo y dejarlo reposar otra noche / día.
- Veréis
que con este 2º reposo, sigue habiendo otra vez la capa más espesa en la
superficie, y bajo ella el jabón líquido, esta vez más espeso. Vuelvo a meter
la batidora, llegando a todos los rincones, para disolver y unir todo. Quedará
en una crema de jabón. Si no os gusta con ese espesor, se puede añadir un poco
más de agua, hasta dejarlo con la consistencia que os guste. Yo lo he visto
bien así.
- Con
la ayuda de un embudo ancho, he ido rellenando las botellas de detergente
líquido que tenía vacía. María Esteve lo deja en el cubo y de ahí, va
dosificando en cada lavado. Yo lo veo más práctico rellenando estas botellas ya
usadas, porque además siempre me gusta agitar el jabón antes de echarlo en la
máquina. Con el frío de estos días, el jabón parece que se cuaja más: añadir un poco más de agua (1/2 vaso a la botella) y agitar bien. Por eso prefiero las botellas a dejarlo en el cubo.
** Un
consejo: tengo la manía de poner siempre el jabón dentro del bombo de la
lavadora. Es algo que mi madre hacía, para evitar que desde el cajetín hasta el
bombo, pueda quedarse el jabón y producir atascos en la máquina. Con el jabón
líquido es más difícil, pero yo sigo haciendo esa práctica de mi madre y me ha
dado siempre muy buen resultado.
Espero
que os guste este jabón. El coste es muy económico y cunde muchísimo. Además
reciclando los envases usado, damos otra oportunidad a esas botellas de
plástico tan difícil de reciclar y el Medio Ambiente seguro que nos lo
agradece. Con cualquier duda o aclaración, me la puedes dejar en los
comentarios. Gracias por estar al otro lado de la pantalla J
He puesto un poco en esta botella de agua, para que se pueda ver
el color con el que queda: verde muy claro. El suavizante y el jabón
en escamas, eran verde, y de ahí ese tono.
Con parte de estos ingredientes, empezó todo.
Apariencia del jabón en los reposos: una capa más espesa
en la superficie, pero en cuanto agitas un poco,
sale el jabón líquido que hay debajo.
Comentarios
Publicar un comentario